¿Qué tan frecuente te resistes a aceptar las situaciones como se presentan en tu vida? Y si cambio la pregunta por ¿Qué tanto sientes que algo te produce sufrimiento?
Resulta que lo que te produce sufrimiento es tu falta de aceptación. Nuestro ego se encarga de PERMITIR que NO aceptemos las personas o situaciones y nos hace creer que siempre es por una causa externa a nosotros, sin embargo, siempre la respuesta está adentro. Como decimos en Corazón de Niño®, como es tu interior es tu exterior, viajemos a nuestro interior para aceptar eso que nos produce sufrimiento.
Realmente la realidad es como es, “el problema real” es la percepción que tenemos cada uno de las personas o situaciones y somos nosotros quienes no las aceptamos. Somos cada uno de nosotros los que nos resistimos a vivir una situación u otra.
Y si tu ego te está diciendo, ¿Cómo puede ser eso cierto, entonces para aceptar todo lo que sucede hay que resignarse a todo? Pues no, la respuesta es comprender el Para Qué de todas las cosas que suceden, sin juzgar, el maestro interno que acompaña a cada uno de nosotros es quien tiene la luz para darle una respuesta verdadera, es quien te da la respuesta más sabia.
Sabías que, ¿el ego es tan veloz, que llega primero a nuestro pensamiento como reacción a cualquier cosa, para que tú te sientas atacado y perturbado? Es la conexión con tu esencia la que te permite tomar el timón y manejarla como tú quieras.
Recomiendo entonces que viajes a tu interior, pues esta es la solución para tu sufrimiento, así que te sugiero escuchar primero tu sabiduría interna y no tu ego.
- Acéptate a ti mismo.
- Identifica los juicios automáticos que tienes para cada situación o persona.
- Evalúa si es realmente tan complejo lo que te está sucediendo.
- Realiza respiraciones conscientes.
- Conecta con tu maestro interior.
- Pregúntate si tu reacción a esa situación la aprendiste de alguien más y, actúas de esa manera por esperar aprobación de los demás.
En la vida siempre ocurre lo mejor que a cada uno de nosotros nos puede pasar, acorde a nuestro proceso de aprendizaje. Resistirse a cualquier situación por mínima que sea, es no comprender que en la vida nos muestran el camino, y nosotros simplemente debemos escuchar y seguir las señales. La vida es sencilla, es más fácil, es nuestro ego el que comienza a llenarnos de “preocupaciones” basadas en un pasado y en un futuro que no existen, para que nos perdamos nuevamente del regalo que es el presente.
Aceptar es diferente a resignarse, ser abnegados o no tener criterio. Aceptar es la llave para salir de cualquier sufrimiento.
